"Un ejército sin espías es como un hombre sin ojos y sin oídos"
Chia Lin, citado por el maestro Sun Tzu en "El arte de la guerra"
Blas de Lezo, cojo, manco, tuerto y sitiado por una fuerza diez veces superior a la suya, nos demostró que su espíritu indómito, la furia española, que tanto fascina a los ingleses permanecía intacto. Un espíritu fundado en valores como el amor a su patria y a su rey, la sencillez, la humildad, la paciencia, la perseverancia, el trabajo, el sacrificio y una vida de permanente acto de servicio a España. Una lección viva y permanente para cualquier español de cualquier época. Mientras España no dé el paso de reconocimiento permanecerá como Blas de Lezo: manca, coja y tuerta, que es así como quieren dejarla los separatistas que desprecian a sus héroes ante el silencio de tantos.
Por José Antonio Crespo-Francés*
Leer: "Un monumento en búsqueda de un héroe"
Documento adjunto: "Diario de Sesiones del Congreso de los Diputados"
*Coronel de Infantería en situación de Reserva
¡ATENCIÓN!